Titanes ( Capitulo VI )

Como todas las mañanas cuando Clara se despertó se fue directa a la ducha y después , se visto con un simple jersey y unos vaqueros y cuando estaba a punto de salir de su habitación oyó una carcajada en el pasillo y como alguien corría por allí, por lo que levanto las dos cejas, estaba claro que era Selene por lo que sonrió, al menos a ella todo le iba genial con el grandullón.

Cuando abrió la puerta vio pasar a Joel como una exalacion persiguiendo a Selene que corría todo lo que podía y movió la cabeza, desde luego a veces la gente se comportaba como niños

-Eh, que esto no es una guardería-exclamo saliendo al pasillo y Joel se paro en seco para mirarla con una sonrisa en lo labios

-Lo siento si te hemos despertado-musito, mientras Selene volvía sobre sus pasos

-Buenos días-le dijo con dulzura mientras se apoyaba en el, Clara los miro y movió la cabeza, a pesar de que el era mucho mas grande que ella, hacían buena pareja, por lo que sonrió

-Ya estaba levantada pero podíais tener un poco mas de respeto, el fantasma que habita en el cuadro del fondo esta totalmente escandalizado-les dijo sin borrar la sonrisa de sus labios y los dos sonrieron a la vez

-No seas tonta-se rió Selene

-Vamos al gimnasio un rato, te apetece venir y hacer un poco de ejercicio?-le pregunto el y ella arrugo la nariz

-Estas loco? Y que me parta la espalda-susurro y el soltó una carcajada

-Venga vente sera divertido-insistió su amiga y ella los miro encogiendo los ojos todo lo que pudo y al final levanto los hombros y por que no? No tenia nada mejor que hacer

-Vale pero... el primero que se ría de mi le corto los colmillos-les advirtió y Joel volvió a sonreír.

Juntos bajaron a la cocina y Selene espero a que se tomara un bol de leche con cereales para después ir al gimnasio, allí ya estaban los gemelos y Joel, cada uno es una maquina entrenando sus perfectos músculos, al verlos una idea le vino a la cabeza

-Tengo una duda existencial, si sois inmortales y tenéis una fuerza sobrehumana, no acabo de pillar esta obsesión por el ejercicio-medito mientras terminaba de bajar las escaleras, los tres al oírla la miraron

-No es una obsesión, simplemente nos gusta, es una forma de pasar el tiempo, como otra cualquiera-le dijo Jecomias, desde el día que había hablado con ellos sobre como distinguirlos, ellos habían cumplido lo de la cadena y a si siempre sabia con quien estaba hablando

-Además, nos mantiene en forma, nunca se sabe que puede pasar-musito Joel y ella asintió viendo como su amiga se acercaba a el, eso era cierto y mas cuando en casa vivía alguien que le encantaba las peleas y de pronto se pregunto donde estaría metido

-Elige-le dijo Joel a Selene y esta sonrió señalando la cinta para correr, Clara la miro, definitivamente era perfecta para ese sitio

-Y tu que? Que te gusta?-le pregunto Josias y ella levanto los hombros

-Sinceramente nunca he pisado un gimnasio, no creo que este preparada para nada de esto-susurro y el casi sonrió y le hizo un gesto para que se acercara

-Entonces probaremos con algo sencillo-le dijo parándose en la maquina de ejercitar los gemelos y ella suspiro, aquello no era buena idea pero no dijo nada obedeció las instrucciones que el le dio para colocarse mientras sentía como los demás la miraban

-No la cargues mucho, no se rompa una pierna-ironizo Joel que había vuelto a su maquina de abdominales y al oírla ella lo miro intentando fulminarlo con la mirada, haciendo que el sonriera

-Que gracioso por dios, casi me meo en las bragas de la risa-exclamo ella casi a la vez que el dejaba de sonreír para levantar la mirada hacia la escalera, en cuanto Clara lo vio hacer aquel gesto supo por que lo hacia por lo que ladeo la cabeza y vio a Jerone en la escalera, iba como siempre impecablemente vestido de negro y los miraba a todos con los ojos como platos, por lo que ella se puso colorada al instante sin poder evitarlo

-Te estábamos esperando-oyó que le decía Joel pero el ni se molesto ni en mirarlo y mucho menos contestarle, clavo su plateada mirada en ella durante unos segundos y luego dio media vuelta y se marcho, durante unos segundos nadie se movió, todos estaban quietos mirando la escalera vacía, a Clara no le había sorprendido que apareciera, lo que la había dejado paralizada era la forma en que la había mirado, no había nada de rabia, ni oído como ella esperaba, mas bien había cansancio y tristeza y eso era algo que la había descolocado totalmente

-Pues nada el se lo pierde-medito Joel como si nada

-Bueno esto ya esta, relajate y disfruta-le dijo Josias y ella sintió con la cabeza.

Y por supuesto que se relajo y disfruto, como que cuando salio de allí una hora después casi la tuvo que subir Joel que intentaba por todos los medios no reírse, le dolía medio cuerpo y zonas que ni conocía y aunque sabia que era una exagerada no podía evitarlo, mientras los demás parecían de lo mas divertidos y ella juraba y juraba que nunca mas la liarían para probar ninguna de esas endiabladas maquinas.

Aunque la verdad es que se lo había pasado en grande y se había reído un montón, se quedo tan echa polvo que el resto del día lo paso en la biblioteca leyendo una increíble edición de “ la divina comedia” que estaba segura de que debía de valer una pasta por lo antigua que era y los grabados que tenia.

Y a pesar de que aun tuvo que aguantar las bromas de Joel y Selene ni les hizo caso en el fondo era lo mas divertido que había echo en esa casa desde que había llegado, por lo que después de comer volvió a su sofá querido y allí se quedo toda la tarde leyendo enfrente de esa impresionante chimenea que a veces la dejaba medio hipnotizada, de Jerone no había sabido nada, ni lo había vuelto a ver, podía haberle preguntado a Joel donde estaba pero eso solo hubiese demostrado que se interesaba por el y eso era algo que no quería dar a entender.

Y casi sin darse cuenta cuando miro el reloj ya debía de ser de noche por lo que se levanto soltando un gemido al sentir las agujetas de las piernas y medio cojeando se acerco a los ventanales y abrió uno para salir al exterior. La parte de atrás de la casa era simplemente preciosa, rodeada de unos impresionantes jardines donde se podía respirar un montón de aromas de plantas y flores, decorado con un par de fuentes pequeñas y un típico laberinto en el centro, aquel sitio le encantaba, de día era perfecto y de noche como mágico por lo bien iluminado que estaba por lo que se apoyo en una de las columnas y se saco su paquete de tabaco.

Era increíble pero desde que estaba allí apenas fumaba, no sabia si les molestaba el olor a tabaco y le sabia mal molestar pero tampoco le habían dicho nada, a si que sobre la baranda de piedra tenia un cuenco que había cogido de la cocina para usarlo como cenicero y cuando fumaba lo hacia allí disfrutando de la paz que le daba aquel jardín, a si que se saco un cigarro se lo encendió y disfruto del sabor, pensando que tendría que bajarse alguna manta de la habitación para ponérsela por encima ya que tenia los pelos de punta de la humedad y el frió que hacia.

-No deberías de estar aquí fuera-la voz de Jerone le hizo estremecerse pero no se movió solo levanto las cejas

-Apuntalo en la lista de cosas que no debería hacer-musito mientras el se ponía a su lado de cara al jardín, durante unos minutos se quedaron callados, ella fumando con aparente tranquilidad y el con la mirada perdida en los jardines.

-A mis hermanos les caes bien, Josias y Jecomias no entienden tu carácter pero les diviertes y a Joel... el tiene algo muy parecido a lo que siente por Selene pero no siente ningún deseo hacia ti, no entiendo por que a ellos los tratas de una forma tan distinta a mi-murmuro y ella le dio otra calada a su cigarro, a veces parecía muy corto con lo listo que se creía

-Tal vez es por que ellos no me recuerdan las formas con las que me pueden matar y tampoco me masturban-medito intentando darle un toque de ironía, al oírla el se giro un poco para mirarla

-Mataría a cualquiera de ellos si te tocara-susurro y ella movió la cabeza, menuda novedad

-Vaya eso es impensable en ti-volvió a ironizar y el movió la cabeza pero no le contesto aunque soltó un gruñido y luego se aparto un poco de la baranda

-Has entrado en el laberinto?-le pregunto y esta vez la que lo miro fue ella, no esperaba esa pregunta, el había vuelto a mirar hacia los jardines y fue entonces cuando Clara observo su perfil. Desde luego los hermanos se parecían muchisimo, aunque cada uno tenia su toque personal, los gemelos tenían una sutil elegancia en sus gestos incluso al andar, por su parte Joel era como mas varonil, en cambio Joel a si de lado estaba claro que tenia una belleza exagerada, algo que se camuflaba al tener la cara siempre descompuesta y llena de agresividad

-No-le contesto y el asintió con la cabeza

-Ven conmigo-le dijo y ella volvió a darle una calada a su cigarro

-Sabes que no acepto ordenes-le recordó y al oírla el se giro en seco y la fulmino con la mirada

-Es que es tan complicado para ti acompañarme algún sitio sin tener que contestarme?-murmuro intentando controlar su rabia y ella levanto los hombros, por lo que el hizo un gesto de desesperacion mientras apretaba sus puños con fuerza-solo quiero enseñarte una cosa, solo eso

Durante unos segundos Clara siguió mirándolo, preguntándose que coño se le habría ocurrido ahora pero la única forma de averiguarlo era ver que quería enseñarle, por lo que apago el cigarro en el cuenco y le hizo un gesto con las manos dándole a entender que estaba esperando por lo que el bajo la cabeza y se aparto aun mas de la baranda para dejarla pasar.

Sin hablar juntos caminaron por el jardín hasta la entrada del laberinto y allí ella se paro mirando el muro de mas de 2 metros de hierba

-Que?-pregunto el y ella hizo un gesto de fastidio, le jodia la vida tener que decir eso y sabia que se iba a arrepentir en cuanto lo dijera pero no tenia otra opción

-No me gustan los laberintos, me da miedo no poder encontrar la salida-susurro sin querer mirarlo

-Te da miedo un simple laberinto y no me tienes miedo a mi?-exclamo divertido y ella cerro los ojos unos segundos, sabia que no se lo tenia que haber dicho, por lo que dio media vuelta dispuesta a volver a la casa, tenia que haber sabido que aquello no era una buena idea pero no pudo ni dar un paso por que Jerone se planto delante de ella con las manos levantadas

-Espera, espera... este laberinto no es lo que aparenta, además estas conmigo, no voy a dejarte sola-le dijo y ella lo miro, estaba claro que decía la verdad y por algún motivo que ella no entendía Jerone quería enseñárselo por lo que se aparto el pelo de la cara y volvió a girarse hacia el dichoso laberinto y sin decir nada se metió por la entrada.

En cuanto entro se paro en seco, no había nada mas que un camino y solo con eso ya se puso nerviosa,le dolían las piernas del ejercicio matutino y no tenia ganas de jugar

pero aun a si siguió el único camino que había hasta que llego a la esquina y se paro de nuevo en seco, Jerone tenia razón, aquello no era lo que ella esperaba, el laberinto había desaparecido y en su lugar había un increíble circulo lleno de rosales entre caminos y debía de haber un montón de clases distintas, ahora solo estaban en flor los rosales que aguantaban el frió pero estaba segura de que cuando hiciera mejor tiempo aquello debía de llenarse de rosas y parpadeo varias veces, aquel lugar era simplemente precioso, alumbrado con un sin fin de farolitos de luz que le creaba una atmósfera de lo mas mágica

-A mi madre le encantan las rosas, le gusta pasear entre ellas saborear sus aromas y cuando están todas en flor sale todas las noches a dar un paseo-le dijo el parándose detrás de ella pero Clara había levantado la vista y se había quedado paralizada ante lo que estaba viendo, en el centro de aquel mini laberinto de rosas había una increíble

estatua y como si estuviera hipnotizada se acerco a ella caminando por el mini camino de piedras, sabia perfectamente quienes eran pero aun a si la había dejado totalmente descolocada, la estatua era de piedra y representaba una mujer de pelo largo sentada en una especie de banco con un bebe de alrededor de un año, con otro sentado a su lado cogiéndole las manos y dos mas mayores sentados en el suelo a sus pies, estaba mas que claro que era Eliud y sus hijos y aquello le puso los pelos de punta.

Cuando llego hasta la estatua la rodeo sin despegar sus ojos de la piedra, siempre le había gustado el arte y por lo poco que entendía esa piedra tenia muchisimos años, debía de haber sido tallada con cinceles y martillo y estaba claro que no la habían lijado por las marcas que tenia, cuando volvió a ponerse de cara movió la cabeza, era simplemente preciosa, las caras los rasgos estaba super bien definidos

-Es... es preciosa-susurro sin poder dejar de mirar las caras de los niños, por la edad que aparentaban Jerone tenia que ser el pequeño que estaba sentado al lado de su madre y se agarraba a ella con las dos manitas como si le fuera la vida en ello, mientras ella tenia encima de las de el la que tenia libre

-Te vi ojear un libro de arte, pensé que te gustaría ver esto si no lo habías visto ya-musito el, lo notaba muy cerca pero no podía dejar de mirar aquella estatua

-Quien la esculpió?-pregunto

-No lo se-le contesto Jerone y ella respiro muy hondo

-Un laberinto protegiendo la estatua de la parte mas importante de la familia... es una gran metáfora-pensó en voz alta

-Solo es una estatua...- le quito importancia el y Clara ladeo la cabeza para mirarle, aunque le estuviera quitando méritos, el era el que había querido que la viera y era por algún motivo

-Y si solo es una estatua, por que me has traído aquí? Tal ves este es el sitio donde guardas los cadáveres de tus victimas preferidas y querías enseñarme donde reposare cuando me mates?-le contesto con todo el sarcasmo para comprobar cual era su reacción y el la miro durante unos segundos en los que su cara no reflejo absolutamente nada

-Y quien te a dicho a ti que merezcas estar en un sitio tan privilegiado?-susurro y Clara sonrió con resinación, “touche” tenia razón su pregunta además de estar llena de ironía también llevaba cierto toque de narcisismo por lo que volvió su vista unos segundos hacia la estatua y luego dio media vuelta

-Muchas gracias por el paseo y por enseñarme lo mas hermoso de este lúgubre lugar-musito y sin esperar respuesta empezó a andar de nuevo entre los rosales para salir de

ese sitio pero cuando casi había salido del mini laberinto se paro en seco y se giro para mirarle de nuevo, Jerone también se había dado la vuelta y la estaba observando

sin moverse de donde estaba

-Sabes la razón por la que a tus hermanos no los trato como a ti?-le pregunto y sin esperar respuesta continuo-por que a ellos jamas les dejaría hacerme lo que tu me haces

Y cuando se lo dijo aparto su mirada y salio de allí sin volver la vista atrás “jaque mate”

Mientras volvía a la casa aun tenia en la mente aquella estatua y ese especie de templo para Eliud y sonrió casi sin darse cuenta, era una gran prueba de amor hacia ella y sus hijos.

Clara ya no se volvió a encontrar con Jerone y en cuanto ceno se fue a su habitación, estaba literalmente molida, a si que se acomodo en la cama con uno de los libros que había cogido de la biblioteca y se puso a leer, no sabia cuanto tiempo llevaba leyendo cuando oyó una especie de gruñido que provenía de la habitación de al lado y supo que era Jerone por lo que alzo una ceja, podía oír como se movía mientras soltaba esos gruñidos y se dio cuenta de repente que tal vez estaba cumpliendo su promesa de no salir por las noches por lo que apoyo la cabeza en la almohada y cerro los ojos unos segundos para después volver al libro pero Jerone seguía haciendo ruidos que la iban poniendo mas y mas nerviosa, por lo que soltó un bufido, estaba segura de que no iba a parar por lo que soltó el libro y se levanto con tranquilidad, saliendo de la habitación se acerco a la de al lado y después de llamar entro sin esperar respuesta.

El joven estaba en medio de la habitación enredándose el pelo con las manos y al verla soltó un bufido

-¿Que haces aquí?vete no quiero que estés aquí-exclamo pero ella cerro la puerta y se acerco a el, Jerone dio un paso hacia atrás pero ella le cojio de la mano y tiro de el

-Acuestate-le ordeno y Jerone soltó un rugido

-Estas loca no te quiero cerca de la cama esta noche-exclamo pero se dejo llevar hasta allí, Clara no sabia muy bien lo que hacia, solo sabia que no podía estar sin hacer nada, por lo que se sentó en la cama y se movió con cuidado tumbándose en ella y le hizo una seña, el joven la miraba con los ojos muy abiertos

-Clara no hagas esto, no me hagas esto-jadeo y ella le volvió a coger de la mano y tiro de el que se dejo acostar empezando a temblar poniéndose de espaldas a ella encojiendose sobre si mismo. Clara se acerco y le levanto la cabeza pasándole el brazo por debajo y se acomodo tras el rodeándole con el otro brazo la cintura, Jerone soltó un siseo sin dejar de temblar

-Cierra los ojos-le dijo ella con suavidad, tenia que tranquilizarlo como fuera y esa era la única manera que se le ocurría

-Estas loca no sabes lo que estas haciendo,-gimió el pero ella lo abrazo aun mas con cuidado.

-Cierra los ojos Jerone -insistió, el continuo temblando un rato mas y al final lentamente fue parando hasta que se quedo quieto y de repente Clara noto como su respiración se hacia mas lenta y tranquila por lo que pensó que al final se había dormido, por lo que sonrió y cerro los ojos, esta vez le había salido bien la jugada

Cuando los abrió de nuevo al despertar Jerone ya no estaba de espaldas se había puesto cara a ella y la estaba mirando, al verle ella arrugo la nariz y Jerone le aparto un rizo de la cara sin tocarla

-Anoche fuiste muy valiente o muy inconsciente al venir aquí y acostarte

conmigo, podía haberme vuelto loco al olerte y tu no tuviste miedo, yo nunca he tenido este sentimiento... pero creo que estoy enamorado de ti y si te hubiese hecho algo ahora ya no quedaría nada de la poca cordura que me queda-susurro, ella siguió mirándole, eso ya lo sabia ella pero era un riesgo que tenia que correr

-Y yo creo que tu jamas me harás daño, como mucho me retorcerás un poco el cuello-medito y el sonrió con suavidad

-Por que viniste y quiero la verdad-le pregunto y ella levanto un hombro

-Como no iba a venir si te oía desde mi habitación, Jerone si esto no te hace bien, no me importa que te vayas por ahí y hagas lo que hagas pero no quiero que sufras como anoche-le dijo, Jerone le resbalo la mano por su cintura y se la apego a su cuerpo

-Me quedare aquí, me gusta despertar contigo a mi lado-le dijo y ella alzo una ceja

-Crees que esto se va a repetir?-le pregunto con ironía y el asintió

-Ahora si, por que se que cuando te necesite vendrás a mi y eso me hace sentir muy bien-medito acariciándole la espalda

-Narcisista-le dijo ella y el le miro entrecerrando los ojos.

-Deja que te bese-le pidió y ella negó con la cabeza, por lo que el hizo un gesto de tristeza-deja que te bese

Clara volvió a negar con la cabeza pero el no le hizo caso acerco su cara y cuando rozo su nariz con la suya ella se aparto un poco por lo que el sonrió divertido y volvió a acercarse, esta vez ella no se movió y muy despacio rozo sus labios con los suyos para luego besarlos dándole suaves besos con los labios entreabiertos hasta que la abrazo un poco mas y empezó a lamerle los labios abriéndoselos y metiéndole la lengua muy despacio, Clara se estremeció y se la lamió con la suya, provocando que Jerone soltara un jadeo y empezó a comerle la boca con ansiedad mientras la estrujaba contra el y la mano que descansaba en su cintura empezaba a bajar por sus caderas resbalando hasta su culo que apreto con suavidad y bajo por su muslo hasta la rodilla tirando de ella para ponerla encima de sus piernas.

Clara pensó que aquello era mas que un beso por como se apretaba el contra ella y por eso separo su boca de la de el, al hacerlo Jerone gimió desesperado

-Eres el ser humano mas duro y frió que conozco-jadeo y ella cerro por unos segundos los ojos

-Y tu el vampiro mas salido y caliente que conozco-le dijo y al oírla el soltó un siseo

-Espero que por tu bien sea el único que conozcas-le advirtió y Clara hizo un gesto de miedo exagerado y el soltó un gruñido y de un salto se levanto de la cama y sin mas se quito el jersey y lo tiro al suelo dirigiéndose al baño, Clara soltó un bufido, siempre lo mismo, siempre terminaban riñendo.

El agua sonó y la olor del gel invadió la habitación, mientras ella se tumbo mirando el techo y cuando se iba a levantar el agua dejo de oirse y en menos de un minuto Jerone volvió a la habitación, cuando ella lo miro abrió al maximo los ojos, iba completamente desnudo y se paseo por la habitación con total tranquilidad yendo al armario, Clara abrió la boca sorprendida, el cuerpo de Jerone era simplemente perfecto, los musculos marcados sus fuertes brazos las piernas, su impresionante culo y su exagerado pene, solo las cicatrizes que llevaba en la espalda como latigazos le hicieron dejar de mirarle con los ojos muy abiertos

-Tu espalda-susurro y el se puso los boxer sin mirarla.

-Solo te has fijado en eso de mi cuerpo, esperaba que te fijases en algo mas -le dijo,

-No entiendo por que tienes esas cicatrices, si te regeneras con tanta rapidez-medito y el volvió a mirarla.

-Eso hace muchos años tal vez quieras ver las de mi pecho también-pensó

en voz alta acercandose a ella, en el pecho también llevaba algunas pero mas pequeñas, Clara movió la cabeza y el se las acaricio

-Quieres tocarlas-insinuo con suavidad y ella negó con la cabeza pero el le cojio la mano y tiro de ella poniendola de rodillas y le llevo la mano hasta su pecho y le hizo rozarle las marcas, al notar su mano echo el labio hacia atrás sacando los colmillos

-Son suaves verdad?-susurro sin dejar de mirarla, Clara intento soltarse pero el no la dejo y empezó a bajar la mano por su musculoso abdomen haciendo que ella volviera a negar con la cabeza

-Jerone no ya esta bien-le pidió pero el no le hizo caso

-De verdad no quieres tocarme, yo si quiero que lo hagas-susurro, Clara respiro muy hondo se estaba mareando y no soportaba aquella mirada de el, cuando le llevo la mano hasta el borde de los boxer los aparto y le metió la mano dentro, al rozarle los dos soltaron un gemido a la vez, Jerone cerro los ojos con los colmillos totalmente al aire y ella totalmente colorada y sin saber como dio un tiron y consiguio sacar la mano de los boxer provocando que el abriera los ojos y la miro con un inmenso odio señalandole la puerta sin decirle una sola palabra, al ver el gesto Clara se levanto y se dirigio a ella sin decir nada

-A veces pienso que solo a la fuerza conseguire romper ese muro que has construido entre los dos-le oyó decir a el pero Clara no le contesto, salio de la habitación y entro en la suya cerrando con llave allí se fue directa a la cama y se tapo hasta la cabeza con el edredon, por mas que intentaba hacer lo correcto con el, nunca salia como ella esperaba.




                                                                                                   Laura Red