En la oscuridad (cap.1)

17 meses después, Selene no solo le había parecido perfecta la habitación, si no que nunca pensó que iba a congeniar tanto con aquella chica con la que había hablado por teléfono ese día.

Desde que entro en aquel pequeño piso de dos habitaciones y un montón de luz, le encanto Clara, con su pelo alborotado lleno de rizos, su descaro, desde luego en los meses que iban a venir se convirtió en mas que una amiga y entre las dos crearon un acogedor piso.

Como casualidades de la vida, Clara tampoco tenia familia y lo llevaba bastante bien, como ella solía decir era un alma libre que le gustaba volar.

Sel se veía como la cabeza pensante, y era evidente que Clara era un torbellino que la llevaba de un lado a otro... estaba claro que eran un buen complemento

Y 17 meses después Selene había terminado su turno y había hecho 2 horas mas extras pensando siempre en el puto dinero.

Cuando se estaba terminando de vestir entro Clara, al verla sonrió

-hola menuda noche te espera en la UCI no veas la movida que hay allí-le dijo para que supiese a que se iba a enfrentar

Aquella noche Clara hizo un gesto de los suyos y se quito el abrigo

-Genial, solo me faltaba eso, tienes cena que he dejado en el horno, solo tienes que calentarla-le comento sonriendo, Sel la miro divertida, su amiga era una cocinitas y le encantaba estar en la cocina

-Estupendo así no tendré que prepararme nada, estoy muerta-musito cogiendo el bolso, Clara abrió su taquilla y soltó una carcajada

-Pues para ser una muerta te conservas muy bien nena-ironizo haciéndola reír de nuevo

-Bueno me voy, que te sea leve la noche-le dijo y su amiga asintió con la cabeza

-Y tu que duermas bien-le deseo

Como siempre salio por la puerta de urgencias la mas cercana al parking y sacando las llaves del coche se acerco donde lo había dejado.

Clara y ella lo habían comprado a medias para no tener que ir en metro por las noches , no es que a Clara le importara mucho pero a ella le daba bastante mal rollo y cuando encontraron esa ganga no dudaron en comprarlo

Cuando llego allí vio por el rabillo del ojo a 2 tíos con aspecto sospechoso que se le acercaban y se puso a la defensiva

-Eh preciosa tienes fuego-exclamo uno de ellos, Selene se giro levemente y negó con la cabeza para volver al coche, estaba mintiendo pero lo único que quería era alejarse de ellos

-Oh vamos preciosa, ni siquiera una cerilla-exclamo de nuevo el mismo

Ella ya había metido la llave en la cerradura del coche cuando noto una mano en su hombro, por lo que dio un respingo y se aparto de inmediato

-He dicho que no y ya vale-musito con voz tajante pero solo recibió una carcajada de los 2 jóvenes lo que la crispo aun mas

-Venga preciosa, no te pongas a la defensiva solo es fuego no te estamos pidiendo nada especial-se burlo el otro claramente, los tenia tan cerca que podía oler la cerveza que debía correr por sus venas lo que le produjo un claro gesto de asco

-Lo siento pero no fumo de verdad y ahora si no os importa tengo un poco de prisa-les dijo abriendo la puerta pero de atrás apareció una mano y le cerro la puerta de golpe, al notarlo dio un respingo y se giro en un movimiento claro de defensiva

ahora los tenia enfrente y demasiado cerca de ella lo que no le gusto nada

-Mirad se que no queréis meteros en problemas... así que por que no lo dejamos aquí-les insinuó con la esperanza de que le hiciesen caso pero por toda respuesta recibió una carcajada de los 2

-Venga nena no seas tonta seguro que los 3 lo podemos pasar bien, no quieres tomar nada con nosotros somos muy divertidos y tienes pinta de estar deseando un trago-le dijo el moreno alzando una de sus manos y rozándole el pelo, Selene instintivamente lo aparto de un manotazo

-Ya vale dejadme en paz-exclamo empezando a ponerse nerviosa pero eso no ayudo en nada ya que los 2 volvieron a reírse y de repente los tenia acorralandola entre ellos y el coche, suaves gotas de sudor empezaron a correrle por la frente realmente se estaba asustando, por lo que reacciono de la forma mas estúpida como siempre, alzo las manos he intento apartarlos de ella pero de repente se vio forcejeando con ellos sin saber muy bien por que, solo sabia que el ataque de pánico que le estaba llegando no iba a poder controlarlo y en eso estaba pensando, cuando sintió un empujón que procedía de alguna parte y mientras los 2 jóvenes se separaban de ella.

Selene fue a parar al suelo, cuando levanto la cabeza lo único que consiguió ver era que alguien estaba literalmente dándose golpes con aquellos 2 imbéciles, por lo que abrió la boca pero no salio nada de ella.

La imagen que tenia ante sus ojos era de lo mas escalofriante no sabia de donde había salido el hombre que estaba forcejeando con aquellos 2 tipos pero estaba claro que sabia pelear por que les estaba dando una buena paliza uno de ellos salio disparado hacia el coche de enfrente chocando con tal fuerza contra el parabrisas que Selene se tapo los oídos intentando levantarse pero le temblaban tanto las piernas que no pudo hacer nada...

De repente vio como el tío que había salido disparado sacaba algo de uno de los bolsillos y al ver que era una navaja de no supo donde salio de su garganta un grito

-Cuidado-grito asustada pero no sirvió de nada por que en ese mismo instante, el joven se lanzo contra el hombre y le hundió el acero hasta la empuñadora en uno de los costados... el aullido que oyó hizo que se estremeciera de arriba a bajo mientras veía como el joven empujaba la navaja hacia arriba

Pero aquello no fue lo que la hizo quedarse en estado de shock, lo que hizo que se quedase bloqueada fue que aquel hombre se deshiciera del tío con el que estaba forcejeando de un empujón mandándolo contra otro de los coches y a una velocidad que no le pareció normal se girase y sin apenas darle tiempo cogiera al otro del cuello y en el silencio se oyese claramente el crujido de un cuello partido.

Selene siguió la escena con los ojos como platos y la respiracion sin apenas salirle de los pulmones, cuando el cuerpo cayo al suelo como si fuese un saco de patatas el hombre se movió de una forma extraña y se saco la navaja del costado lanzándola junto el cuerpo

Ella lo podía oír resoplar pero desde el suelo no podía verle, el se tambaleo un poco y se acerco con lentitud

-Estas bien-le escucho decir con un tono de voz algo extraño, Selene asintió con la cabeza

-Te ha apuñalado-susurro intentando levantarse pero le volvieron a flaquear las fuerzas por lo que enseguida noto la mano de el cogiéndola del brazo para ayudarla, apesar de la ropa que llevaba pudo notar el frió de su roce y se estremeció de nuevo, cuando consiguió estar de pie al fin pudo mirarlo

Al hacerlo se quedo totalmente sorprendida, aquel hombre debía de ser mas o menos de su edad, no debería de tener mas de 33 años, el pelo de un color chocolate le caía hasta casi el hombro de un liso increíble para un hombre, el flequillo era tan largo que no podía verle los ojos pero sus facciones eran todo lo contrarias a lo que esperaba de su aspecto grandote y musculoso que podía reconocer por encima de aquel abrigo

hasta los pies..

-Sera mejor que te subas al coche y te vayas-le dijo soltándola tan deprisa como la había levantado

-Pero estas herido, deja que te acompañe hasta urgencias-le pidió ella pero el negó con la cabeza girándose hacia donde estaba el joven que había tirado contra uno de los coches

-Vete yo estoy bien-musito empezando a andar hacia el pero a medio camino se tambaleo y ella se acerco precipitadamente en un intento de sujetarlo, pues estaba segura de que aquello era debido a la sangre que estaba perdiendo por la herida

-Y una mierda estas sangrando mucho, voy a llevarte a urgencias-le dijo ella intentando apoyarlo en uno de los coches

-No, he dicho que te vayas,tengo que deshacerme de estos-exclamo el en un tono bastante molesto por lo que ella le miro sin entenderle muy bien

-Estos pueden esperar, ya se encargara la policía de ellos, ahora tiene que atenderte un medico a ti-insistió dando media vuelta pero enseguida noto la mano de el de nuevo en su brazo y la paro en seco

-He dicho que NO-susurro y aunque sonó bastante amenazador ella le miro de nuevo

-No voy a dejarte aquí, después de lo que has hecho por mi... a si que tu decides-le dijo desafiante, durante unos segundos el se quedo callado y al final soltó un suspiro

-Esta bien ¿trabajas en el hospital?-le dijo cambiando el tono de su voz

-Si soy enfermera-le contesto Selene y el asintió con la cabeza

-Vamos a tu casa-le dijo el sorprendiéndola de repente

-Pero estas sangrando mucho, lo que necesitas es una cura urgente-medito sin saber que decirle y el negó con la cabeza

-No voy a ir al hospital, tu casa o nada-musito con firmeza.

Selene se quedo inmóvil durante unos segundos... vale le había salvado de una situación donde no estaba segura de como iba a salir pero de ahí a llevárselo a su casa, no le conocía y no podía estar segura de el pero por otra parte el había arriesgado su vida por ella...

-Esta bien-decidió en un claro impulso de agredecimiento-a ver deja que te mire la herida por favor

El siguió inmóvil durante unos segundos luego se abrió el abrigo ligeramente y ella se lo aparto para mirarle no sin cierta dificultad

allí con aquella luz no veía nada y soltó un bufido de fastidio

-Esto es una locura no veo nada, espero que no te desangres por el camino, debería llevarte a la fuerza al hospital-pensó en voz alta de nuevo y recibió algo parecido a una risa sarcástica

-De verdad crees que podrías llevarme algún sitio, si yo no quiero ir?-le dijo con ironía, Sel ni siquiera le contesto, le cogio del brazo y se lo paso por los hombros tirando de el..

-Anda sujetate bien la bufanda -le pidió empezando a andar

Pero cuando llegaron al coche el se paro en seco

-Espera aquí-le ordeno mas que le pidió, al oírle ella lo miro

-Tu estas sordo?no puedo esperar, hay que curarte-exclamo, no entendía como el no se daba cuenta de la gravedad de su herida, pero por lo visto no, por que lo oyó reír por lo bajo y sin mas se soltó de ella

-Metete en el coche vuelvo enseguida-le susurro y se dirigió hacia los dos tíos dando tumbos, Selene movió la cabeza y abrió la puerta del coche sentándose en el asiento del conductor

-Esto no esta pasando-murmuro, no podía creer lo que estaba haciendo, por unos segundos pensó en llamar a Clara pero sabia que su amiga no cogía el móvil cuando trabajaba, podía arder el mundo, sus pacientes eran lo primero por lo que soltó un suspiro-estas loca Sel, muy loca

En un momento el joven había vuelto y se había sentado en el lado del conductor.

El piso estaba a unos 15 minutos del hospital y en todo el trayecto el ni se movió, por lo que ella le miraba de vez en cuando hasta que el soltó un suspiro

-Sigo vivo no es tan fácil matarme-murmuro haciendo que ella se sobresaltara al oírle, no sabia como se había dado cuenta de que lo estaba mirando, pues tenia la cara ladeada hacia la ventanilla y movió la cabeza

-Eso espero no me gustaría tener que dar media vuelta con un cadáver en mi coche a la morgue-medito y le ollo reírse

-Podías abrir la puerta y tirarme a la cuneta sin parar el coche-le insinuó y ella arrugo la nariz, seguía sin entender como no se había como mínimo desmayado,

-Por cierto... puedes decirme que has hecho con esos tíos?-le pregunto

-No-musito el y ella abrió los ojos como platos, empezaba a pensar que tal vez no había sido buena idea llevárselo, ojala hubiera estado con ella Clara

Cuando llegaron a su destino aparco donde pudo y le ayudo a salir hasta que lo dejo apoyado en el ascensor no se dio cuenta de lo que realmente pesaba, tenia los brazos muertos, mientras esperaba a llegar a la planta donde tenían el piso se permitio mirarlo de reojo, como no solo pudo verle de la cara la boca unos labios carnosos una barbilla firme pero lo que estaba claro es que era enorme debía de medir como

mínimo 1`90

Una vez en el piso, bueno, lo llevo hasta la cocina y lo sentó en uno de los taburetes

-Quitate el abrigo, vengo enseguida-le dijo yendo con rapidez hasta el cuarto de baño y cogiendo todo lo que le iba a hacer falta

Al volver casi estuvo a punto de caersele todo al suelo, el se había quitado el abrigo dejando al descubierto una camisa blanca de burberry, que en el costado derecho estaba practicamente toda manchada de rojo por lo que soltó un gemido al oírla, el joven levanto la cabeza y al final la miro

-No iras a desmayarte?-le pregunto con sarcasmo, Selene ni siquiera se molesto en contestarle, se acerco dejo las cosas que llevaba en el banco junto al taburete y sin contemplaciones le quito la bufanda que también estaba empapada y le desgarro la camisa por donde estaba la herida.

Al verla por fin pensó que era casi imposible que no se había desmayado con la cantidad de sangre que había perdido y el tamaño de ese corte

-Dios no puedo creer que no te hayas desmayado, deberías necesitar una transfusión-susurro poniéndose los guantes, el volvió a reír

-Eso es gracioso-pensó en voz alta, mientras Selene le desinfecto la herida que seguía sangrando e hizo un gesto de fastidio

-Joder es muy profunda y no tengo nada para darte algo mientras te coso-gimió, el soltó un sonido divertidos

-Tienes coñac?-pregunto y ella arrugo la nariz

-Creo que si-medito cogiéndole la mano y poniéndosela en la gasa que tenia en la herida para que se la sujetara.

Sabia que Clara no solía beber coñac pero a veces lo utilizaba para la cocina así que fue a uno de los armarios y cojio la botella con un vaso, cuando se los tendió el cogió la botella con la mano libre y paso del vaso, por lo que el le quito el tapón a la botella y empezó a beber de ella dando largos tragos, de repente ella levanto la cabeza para decirle que no hacia falta beberse la botella de golpe cuando al fin le vio la cara al completo.

El joven había inclinado la cabeza hacia atrás para beber dejando al descubierto su rostro y se quedo con la aguja y el hilo en la mano su cara era simplemente perfecta como las de las estatuas griegas de los museos que a Clara le gustaba tanto arrastrarla... el debió de notar su mirada por que giro la cabeza y sus impresionantes ojos azules de un color tan claro que por un momento pensó que eran de color

plateados se posaron en ella por primera vez, Selene se puso colorada sin poder evitarlo y bajo la mirada, nunca había visto un color de ojos como esos

-Creo que deberías de tumbarte en el sofá-susurro

-¿Por que?-quiso saber el y ella se aparto un poco de el

-Con la sangre que has perdido y lo blanco que estas, creo que deberías estar tumbado-le dijo sin mirarle, el se bajo del taburete pesadamente y dejo que ella le ayudara hasta el sofá que había en el pequeño salón

Allí Selene extendió la manta con la que ella y su amiga se tapaban en sus sesiones de cine y el se tumbo de lado volviendo a beber de la botella

-Esta bien voy a coserte-musito ella y empezó su trabajo, para su asombro el ni se inmuto cuando empezó a coserle y cuando ya levaba como 15 puntos la botella resbalo de la mano del joven y callo al suelo

Al mirarle se dio cuenta de que el se había desmayado, por lo que soltó un gemido y siguió cosiéndole, con 25 puntos el trabajo quedo terminado le tapo la herida con una gasa y esparadrapos como pudo le quito la camisa o lo que quedaba de ella y sin dudarlo fue a su habitación y lo envolvió con otra manta tapándole con cuidado

fue entonces cuando se recreo en mirarle, de verdad que era increíblemente

guapo, con los ojos cerrados tenia unas pestañas increíblemente largas y soltando un bufido se fue a su habitación se lavo a conciencia las manos y se tumbo vestida en la cama, iba a tener un enorme problema cuando Clara volviera y lo viera en el sofá...

El sueño de Selene apareció de la nada, solo había oscuridad y de repente se vio en la cama con alguien en su habitación, notaba su presencia pero no podía verle, aunque debía de estar nerviosa la verdad es que no lo estaba se sentía como flotando y totalmente relajada, cuando vio una sombra acercarse a ella, ni siquiera le reconoció, no era alguien que conociese apenas lo veía solo era una sombra

-Quien eres-pregunto

-No importa, no voy a hacerte daño-ollo a un hombre que se acercaba a la cama

-¿Por que estas aquí?-quiso saber agarrándose a las sabanas

-De verdad importa?-susurro la voz

-Que quieres de mi?-insistió ella y ollo un suspiro en la oscuridad

-Tengo una deuda contigo-musito la voz

-Una deuda-repitió ella

-Si una deuda, solo quiero saber como pagártela-la voz parecía como de terciopelo

-Pagármela-volvió a repetir, no entendía nada, por lo que se movió sobre la cama para encender la luz y enseguida una mano le envolvió la muñeca con suavidad

-No necesitas la luz-le dijo la voz

-No se quien eres -insistió, la mano le acaricio la muñeca con suavidad

-Si lo sabes, en tu interior-la voz sonó casi al lado de su cabeza y ella se quedo paralizada

-Tengo miedo-susurro ella tragando saliva y de repente noto como alguien hundía la cara en su pelo

-Me gusta tu olor... es tan dulce, hueles a jazmín-susurro sobre su pelo

-Que quieres de mi?-pregunto de nuevo mientras sentía una mano posarse en su nuca y echarle la cabeza hacia atrás

-Necesito hacer algo-le murmuro el hombre y cuando iba a preguntarle el que, unos labios se posaron sobre los de ella dejándola totalmente paralizada, eran unos labios fríos y a la vez ardientes que rozaron los suyos con lentitud para abrirse de repente con suavidad y sentir como una lengua le dibujaban el contorno de los suyos

Selene levanto las manos y busco en la oscuridad hasta encontrar el pecho de un hombre con unos pectorales muy marcados y musculosos poso sus manos sobre ellos y soltó un suspiro, sin saber muy bien por que estaba dejando que alguien la besara pero era tan agradable y a la vez tan excitante al entreabrir los labios para suspirar la lengua de el se coló en su boca con la misma lentitud que había acariciado sus labios y empezó a recorrer su boca buscando la suya mientras la abrazaba con suavidad cuando la encontró la acaricio envolviéndola con la suya

Selene se estremeció al sentir como sus lenguas se acoplaban de aquella manera mientras la empujaba hacia atrás tumbándola en las suaves almohadas, sus manos subieron hasta los cuadrados hombros y los acaricio hasta llegar a su cuello allí se paro mientras el hacia que su lengua entrara en ella y saliera de su boca como si fuese un acto sexual mas que un beso lo que la hizo sentir un intenso deseo abrazándose contra el a la vez que apartaba la cara para poder respirar

-Tengo que irme-susurro la voz mientras le lamia el contorno de la oreja arrancándole un gemido

-Que?-solo pudo decir, aquellos brazos siguieron abrazándola como si no la quisieran soltar

-Tengo que irme antes de que no pueda controlarme-le dijo la voz

-No-suplico ella pero los brazos que la rodeaban aflojaron el agarre

-No despiertes-susurro la voz y sin poderlo evitar se esfumo de su lado igual que vino

de repente Sel dio un salto en la cama y se sentó totalmente despierta apartándose el pelo de la cara

-Joder-jadeo pensando en el sueño tan raro que había tenido al mirar la hora vio que habían pasado solo 4 horas desde que había llegado a casa y de golpe le vino a la cabeza el inclino del salón ni siquiera se había preocupado por si tenia fiebre así que se levanto y salio sin hacer ruido pero al llegar al salón descubrió que allí no había nadie... el sofá estaba vació y no había ninguna muestra de que alguien hubiese estado allí ni la camisa rota ni las gasas manchadas todo estaba limpio excepto la botella de coñac que estaba en la mesita de cristal casi vacía Selene soltó un bufido preguntándose si el sueño había sido un sueño realmente o una despedida....

Cuando volvió a despertar ya era de día, se levanto arrastrando los pies y en la cocina encontró a su compañera de piso bebiendo un vaso de leche

-Se puede saber que le has echo al coñac -le dijo divertida señalando la botella vacía , y ella soltó un bufido

-No creo que puedas creerme si te cuento lo que me paso anoche-medito acariciando la botella, Clara la miro arrugando las cejas

-Bueno tu prueba, sabes que yo estoy abierta a todo-le dijo algo divertida, Selene movió la cabeza, eso lo sabia pero no estaba segura de que la fuese a creer, de todas formas empezó a contárselo y a medida que desarrollaba el relato la cara de su amiga fue pasando de divertida a curiosidad, llegando a ponerse pálida y cuando termino la miro durante unos minutos sorprendida, Selene espero con paciencia a que reaccionara

-No tengo muy claro lo que mas me sorprende... que TÚ hayas traído a un desconocido a nuestro piso, o lo que paso después... -musito, Selene ya esperaba esa reacción y también sabia que solo era el principio-como coño se te ocurrió?tu Doña seguridad te traes a casa a un tío que le a roto el cuello a otro? En que estabas pensando?y si te hubiera hecho algo?por no hablar de que mierda hizo con los dos tíos... y por cierto¿estaba bueno?¿como se pudo largar con lo que había sangrado?

Selene suspiro la mente de su amiga estaba trabajando a todo rendimiento

-Mira no lo se sinceramente no tengo ni idea de por que lo hice, a si que para que pensar, el me ayudo y yo le cure... ya esta-le dijo pensando que su amiga seguía pensando mas preguntas en su mente.

Clara frunció el ceño y levanto un hombro

-Bueno me voy a dormir un rato, al menos se marcho y espero que no se haya llevado nada de la casa, sera mejor que no le demos mas vueltas, a si que como mañana libramos las 2 nos vamos esta noche a un pub que me han dicho que esta en el Soho que es de lo mas guapo -decidió dejando la taza en la pila de la cocina

-Esos pub lúgubres que tanto te gustan-le dijo Selene y ella se echo a reír pasando por su lado y dándole un beso en la mejilla

-Si esos, tengo ganas de beber y bailar, no te preocupes por mi voy a dormirme enseguida-le dijo y salio de la cocina

-Por cierto...al doctor Hamilton le han destrozado la luna del parabrisas y no se sabe ni quien ni como..a si que creo que esto va a ser nuestro pequeño secreto si no queremos tener problemas en el hospital, sera mejor que cierres la puerta con los cerrojos, no quiero mas intrusos al menos cuando yo duermo-la oyó gritar desde la puerta de su habitación y Selene levanto la mirada hacia el techo, no tenia que haber ayudado a aquel hombre, tenia que haber ido a pedir ayuda el hospital... 

                                                                                               Laura Red